Oficina Funeraria Castro Urdiales - Funeraria Merino Díez | Mémora

Experiencia negativa: Total opacidad en sus presupuestos. Sin transparencia. Con estas premisas lo que persiguen es aprovechar el momento -lógicamente doloroso- y, en términos coloquiales "meter el rejonazo" al cliente. Al margen, y respecto a la calidad del servicio, francamente mejorable. Previo a mi opinión, la puntuación que acumula esta funeraria es de 3,4. Si bien, el número de opiniones en este canal, es reducido, el resultado estadístico es representativo --quizá demasiado alto--..

Experiencia fantástica: Personal muy agradable y competente. A destacar el trabajo de José tan atento familiar humano y cercano. Pero se puede decir lo mismo de todos los demás compañeros. Gracias.

Experiencia fantástica: Es una empresa muy profesional saben ayudar en los momentos más difíciles y la verdad un trato mejor imposible

Experiencia negativa: Muy mal. Hicimos el encargo telefónicamente, pedimos dos veces que nos mostraran una foto del centro encargado, si lo hubieran hecho nos hubiéramos dado cuenta que al texto de la banda le faltaba una letra, y se hubiera solucionado. Llamamos para que nos dieran una solución al respecto, ni una disculpa, quedaron pendiente de llamarnos en dos ocasiones, además de no hacerlo, en la última nos dijeron que no habíamos procedido al pago, cosa que hicimos incluso antes de firmar el presupuesto, tampoco nos enviaron la factura, se puede hacer peor... Una mala experiencia en unos momentos delicados.

Experiencia negativa: Ahora mismo un coche de esta empresa en dirección prohibida da por maliaño..

Experiencia fantástica: Todo amabilidad y facilidad para estos momentos duros.

Experiencia negativa: Su encargada es una incompetente. En mi caso solo se interesó por cobrar, realizando una gran chapuza en el cobro. Si reseñar en positivo a Manu, el fúnebre q me tocó.

Experiencia negativa: empresa NO RECOMENDABLE , se aprovechan de la gente.

Experiencia fantástica: Atendieron de forma magnífica la muerte de mi tia abuela y de mi abuelo. Eternamente agradecido.